Es bueno tener un rincón privado, en mi caso Gruta Perdida, un lugar donde escribir sin que nadie venga a molestar o mal interpretar lo que se diga...un rincón al cual solo vienen algunos amigos a pasar un momento para ver que nueva burrada se le ha ocurrido a este escriba sentado.
Hoy tenía necesidad de este rincón, saludable como pocos, para dar rienda suelta a algo que no me ha dejado dormir...y se trata del mundo virtual. En este mundo al que llegamos atraídos por alguna razón: búsqueda de información, compartir aficiones, y un lago etc...etc...en el que caben desde las mas altruistas motivaciones a las mayores perversiones.
Cuando, como en mi caso, encuentras a un grupo que comparte tus mismos gustos es fácil empezar a compartir con ellos momentos especiales y pasar, en algún momento dado al conocimiento personal con esas personas, con otras, por razones de lejanía, la cosa se hace mas difícil...pero las afinidades, al igual que los desencuentros, y los sentimientos, sean del tipo que sean, se van abriendo paso de forma natural. Hasta aquí estoy pintando un mundo idílico en el cual las personas actúan con total y absoluta naturalidad, siendo ellas mismas...pero ese mundo idílico se ve truncado cuando la virtualidad en la que nos movemos deja de ser un reflejo "autentico" del ser humano que está detrás del teclado para convertirse en una falsa realidad...en un falso reflejo, en un espejismo virtual, en una recreación perversa de una personalidad que no existe; en una creación de algo que nos gustaría ser pero que no somos.
Hay una delgada linea, muy delgada y frágil que se traspasa con demasiada naturalidad y facilidad. En este mundo virtual hay cabida a toda clase de "realidades", tanto verídicas como inventadas...y ahí nace el problema...¿de quien podemos fiarnos? ¿de quien no?. ¿Es este mundo virtual una mera diversión de ociosos, una proyección de frustraciones, un entretenimiento , un pasatiempo, o es algo mas...?.
La experiencia me dice, la real no la virtual pues en está ultima tengo muy poca y soy algo pardilla, que tenemos una tendencia innata a querer mostrar lo mejor de nosotros, tanto en el aspecto físico como en el plano intelectual, si eso lo hacemos en nuestra vida cotidiana que no haremos en la virtual. Lo malo de todo este entramado de chips y demás es que siguen habiendo personas tras del teclado, personas con sus carencias, virtudes y defectos, que se magnifican a través de las ondas. Y lo peor es que hay personas que saben manipular, que saben aprovechar esas carencias, esas virtudes, esos defectos, en beneficio propio...sea del tipo que sea ese beneficio.
Quizá estoy tratando de justificarme escribiendo esto, pero no...no tengo nada que justificar...simplemente hago y digo lo que siento y pienso en cada momento, y no voy a dejar que nadie...absolutamente nadie me obligue a nada que yo no quiera hacer, decir o pensar apelando a unos sentimientos mal entendidos. La libertad de expresión, esa libertad tan atenazada en los últimos tiempos, es la plasmación de nuestro libre albedrío con todas sus consecuencias, desgraciadamente no es así en muchas partes del planeta y aun lo es menos es muchisimos lugares de la red, donde se apela a esa misma libertad para cerrar bocas. Hay algo que no debemos nunca de olvidar y es que el respeto y la buena educación no se han de perder jamas.
Por eso voy a mandar a la Cárcel de Papel a todas aquellas personas que a través de este mundo virtual, que tan maravilloso o mezquino puede ser, manipulan, dañan, utilizan, tergiversan, se burlan, y un largo etc...etc...de mezquindades y maldades...y los envío a través del ancho y largo campo virtual a la galaxia de los olvidados...por los siglos de los siglos y que Maat nos proteja. (mejor dicho que nos ilumine)
