domingo, 23 de marzo de 2008

¿Prestigio, popularidad o simplemente vanidad?


Había un tiempo que para llegar a ser famoso se debían de tener unos antecedentes prestigiosos, fuera en el campo de la escritura, de la ciencia, del arte o de cualquier actividad humana que aportase algo a la Humanidad o a la sociedad. No llegaba cualquiera a tener ese marchamo de famoso.

Hoy en día cualquier mochuelo puede llegar a famoso, bastan esos 15 minutos de publicidad, como decía Andy Warkol, y ya tenemos en la cima de la popularidad al mas mediocre de los mediocres, al mas friki de los frikis, al jovenzuelo/a de turno sea como Gran hermano, como cantante frustrado, como bailarín torpón...vamos que cualquiera puede llegar a ser "famoso". Fama discutible y discutida la lograda de esa manera, sin méritos propios mas que esos minutos de publicidad. También decía Andy Warkol: "Me fotografían, luego existo", sagaz visión la de este señor que se ha convertido en una realidad, triste realidad, pero realidad al fin y al cabo.

Es cierto que en los tiempos que corren hay infinidad de soportes para darse a conocer, soportes inmediatos y que tienen una proyección mundial. Internet es uno de esos soportes en los cuales poder dar rienda suelta a las necesidades de muchas personas en encontrar el reconocimiento a su actividad sea esta del genero que sea. Y dicho lo anterior lanzo la pregunta: ¿qué nos impulsa a participar o a estar en le red?.

Difícil respuesta, si es que queremos ser honestos y decir lo que realmente nos impulsa. Pero como en todas las cosas de la vida, el tiempo pone las cosas en su lugar, con tiempo podemos dedicarnos a cribar el grano de la paja, es ardua la labor pero merece la pena. Y en esa paja que vamos convirtiendo en balas encontramos una actitud que cae dentro del campo de la psicología: la Pseudología fantástica.

Detrás de ese hermoso nombre se encuentra lo que se conoce mas facilmente como mentira. Hay personas, en la red se encuentra el lugar idóneo, que mienten de forma compulsiva, son personas inteligentes pero con una auto estima bajísima y que buscan un protagonismo que no tienen en su vida cotidiana. En el fondo es un rasgo de personalidad patológico, no por ninguna enfermedad mental, si no que se produce por una conducta inmadura.

Es una ansia subyacente de aceptación social, la que hace que personas normales en su día a día se conviertan en seres fabulosos escudados detrás de un alias, en un foro, en un chat o en un blog. Que se crean una existencia fabulosa, que hablan de ella con personas a las que acaban de conocer, que se aferran a sus mentiras y que acaban creyéndolas. Esas mismas personas que en un momento dado nos dan como rasgo de su carácter una determinada actitud o cualidad al minuto siguiente se contradicen al hacer y decir todo lo contrario.

J. Greenberg dice: "Dada la conciencia de nuestra mortalidad, para sentirnos seguros, necesitamos sentirnos protegidos de ese desafío existencial. Tratamos de vernos como valiosos contribuyentes de un modo significativo, Y cuando mas nos valoran los otros, mas especiales y , por lo tanto, mas seguros nos sentimos."

¿ Aceptación social ? ¿Seguridad existencial ? ¿ No será lisa y llanamente SOLEDAD ?

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